jueves, 29 de diciembre de 2011

Mi wishlist para la Fnac

Querida Fnac:

este año he sido muy buena. He trabajado mucho y he leido mucho. Y me gustaría, si es posible, que si me tocara el sorteo de navidad, la Fnac me trajera lo siguiente:
Total:  2010,35 euros

A ver si hay suerte!

Leyendo... y libros que dejé de leer...

A lo largo de este año he leído un poco, menos de lo que me gustaría, y sois testigos de los libros que he terminado. Pero también he intentado leer otros que, por unos motivos u otros, he dejado a medias definitivamente, o he dejado a un lado temporalmente esperando encontrar el momento adecuado para continuar con ellos. He aquí unos cuantos, los que me acuerdo en este momento:

La versión de Barney. Mordecai Richler.
No sé muy bien porqué, pero comencé a leerlo y me aburrió soberanamente. Me parece algo parecido a Bukowsky, con la diferencia de que leer a Bukowsky me gusta. Tal vez fue el momento, pero no tengo claro si le volveré a dar una oportunidad.


Dinero. Martin Amis.
Creo que el error fue cogerlo justo después de haber dejado La versión de Barney. Me resultó tan parecido al anterior, que le cogí manía y lo abandoné enseguida. Con la de cosas que hay por leer por ahí, no soy de dar muchas oportunidades a los libros. O me gustan o no, pero sufrir por sufrir, es tontería. Es posible que le de una segunda oportunidad más adelante. O no, ya veré.

El contador de historias. Rabih Alameddine.
Lo dejé a medias y no porque no me estuviera gustando. Pero exigía un alto grado de concentración, porque son historias encadenadas, al estilo de Las mil y una noches. En aquel momento necesitaba leer una novela más normalita, más lineal. Lo retomaré con más calma.

La ciencia de la felicidad. Sonja Lyubomirsky.
No soy mucho yo de libros de autoayuda. A mi me gustan más bien las novelas. Pero este libro me lo regalaron y tenía que hacerle aprecio. Lo voy leyendo a ratos, para no saturarme. Y la verdad es que para el tema que trata no está mal, es bastante entretenido.

2666. Roberto Bolaño.
Lo estoy leyendo tranquilamente. Pero es un tocho y tengo tantas ganas de leer otras cosas que no me puedo dedicar exclusivamente a este. De momento me está gustando, aunque tengo que reconocer que no tiene ese punto de enganche que esperaba. Seguiremos informando...

Dioses comiendo moscas. Jorge Biarge,  Sergio Perales, Ernesto Sierra.
Libro de relatos que promete mucho y que me voy leyendo poco a poco porque  quiero saborearlo sin perderme nada. En breve cuento más...

Y me parece que eso es todo. No sé con cuál de ellos seguiré o cuál dejaré definitivamente, ya os iré contando.

84, Charing Cross Road. Helene Hanff

Una delicia de libro. Me sedujo la portada, que tiene un no sé qué nostálgico, antiguo...

Una pequeña joya, encontrada un poco por casualidad. No se trata de una novela, ni de un ensayo, ni de un cuento. Es la recopilación de la correspondencia que durante muchos años tuvo la autora, Helene Hanff, con el personal de la librería Marks & Co, con quienes estableció una relación personal a distancia. Una amistad inusual, inesperada y desinteresada. El libro es, en sí mismo, una oda a la amistad y al amor por los libros por lo que era inevitable que me gustara...

Más sorprendente aún es saber que la correspondencia es real, fruto de las inquietudes literarias de Helene Hanff, escritora americana de obras de teatro que no le dieron ni de comer, quien, en su ansia por conseguir libros de segunda mano en buen estado, se pone en contacto con una librería londinense que comienza a hacerle llegar sus encargos, junto con cartas cada vez más personales. Curiosamente, esta pequeño libro le dio toda la fama que sus obras de teatro no le proporcionaron. 

Un libro bonito y recomendable, aunque, una vez más, lo cogí en la biblioteca y ya me está dando pena no tenerlo en mi estantería...

El vagabundo de las estrellas. Jack London

Marciano. Así lo describió el compañero de trabajo que me lo recomendó, y no puedo más que suscribir sus palabras. El vagabundo de las estrellas es un libro muy marciano. Y sin embargo, me ha gustado mucho.

Inicialmente se puede pensar que las historias que te pueda contar un preso condenado a muerte y que se pega la vida sufriendo el castigo de la camisa de fuerza, van a ser monotemáticas. Nada más alejado de la realidad.

El tormento físico que sufrirá Darrel Standing da en su caso paso a otro plano de existencia, el del espíritu separado de la carne, que le permite recorrer sus vidas pasadas, las cuales son de lo más interesantes. Una buena reflexión sobre la vida y la libertad del ser humano, sobre su capacidad de decisión, y sobre la posibilidad elegir ser feliz más allá de las dificultades.

Un libro interesante, aunque creo que solo lo recomendaría a determinadas personas porque es curiosamente raro...

La cena. Herman Koch

Una nueva recomendación de mi librería favorita, la Librería París de Zaragoza, en la que generalmente me hacen muy buenas recomendaciones.

Este libro se lee en un periquete. La historia transcurre a lo largo de una cena, en la que la tensión va in crescendo. Mientras los platos son servidos, se va desgranando algo que ocurrió de la mano de los hijos de las dos parejas que están cenando.

Para mi, lo realmente importante del libro es lo que te hace reflexionar. No puedes dejar de preguntarte acerca de la responsabilidad de los padres en la educación de los hijos, hasta qué punto el carácter de una persona viene determinado por los genes o por el ambiente en el que se educa.

Sí, fundamentalmente me pareció inquietante. La relación que se establece entre padre e hijo, la forma de disculpar los errores o de asumirlos que tienen los diferentes personajes. Me gustó mucho, no tanto por la historia que cuenta (que recuerda mucho a una ocurrida hace relativamente poco tiempo en Barcelona) sino porque me ha hecho pensar y preguntarme ciertas cosas. Recomendable.

Habitaciones cerradas. Care Santos

Llega final de año y se me han acumulado unos cuantos libros que comentar. Algunos de los cuales, leí hace ya algunos meses. Y es que he tenido el blog muy descuidado. Ya perdonaréis los poquitos seguidores que tengo, pero esto de no tener conexión a internet en casa equivale un poco a vivir en la época de las cavernas.

Poco os puedo decir sobre este libro que me leí este verano y del que ya apenas recuerdo gran caso. Me lo regaló mi hermana por mi cumpleaños porque a ella le había gustado mucho (gracias, sister!). En general, nuestros gustos en temas de literatura difieren mucho mucho. En este caso, no tanto. El libro me gustó. No me entusiasmó, pero me entretuvo bastante. La historia es muy entretenida, engancha. Sin embargo para mi tiene una gran pega y es que tiene tantos personajes y tantos nombres que me pareció un poco demasiado complicado. Me liaba un poco la trama.

Sin embargo, la historia está bien construida, y me gusta como escribe esta autora (y eso que yo tengo cierta reticencia hacia autores españoles contemporáneos, la verdad). En resumen, me gustó aunque no me ha dejado especial huella. De hecho, hace solo unos pocos meses que lo he leído y no tengo muchos recuerdos de la historia que contaba, solo algunas pinceladas...
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